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Política exterior en planes de quienes aspiran gobernar Costa Rica

Política exterior en planes de quienes aspiran gobernar Costa Rica

Los planes en política exterior de los candidatos que se disputarán la presidencia en Costa Rica el 6 de abril próximo quizás sean los aspectos de sus respectivos proyectos de gobierno menos publicitados, aunque sin llegar a ser desconocidos.

Al comienzo de sus campañas electorales, tanto el aspirante del Partido Acción Ciudadana (PAC), Luis Guillermo Solís, como el del Partido de Liberación Nacional (PLN), Johnny Araya, adelantaron algunos aspectos de sus respectivas agendas de asuntos exteriores de llegar a gobernantes.
Según su plan, Solís procurará mejorar la participación costarricense en el Sistema de la Integración Centroamericana y fortalecer la integración en áreas claves para este país, algo descuidado por las administraciones liberacionistas.
Frente al diferendo de fronteras con Nicaragua, el profesor de Ciencia Política e Historia prevé reactivar la comisión binacional y alentar el desarrollo fronterizo a través de las zonas económicas especiales.
Es inminente corregir los errores históricos que llevaron al conflicto, porque estos países "no tienen causal de divorcio y son vecinos que estarán allí para toda la vida", afirmó el triunfador en las elecciones del 2 de febrero.
Costa Rica es presidente pro tempore de la Comunidad de Estados Latinoamericano y Caribeños (Celac) y Solís dice que, de vencer también en la segunda vuelta, manejará el tema con espíritu de pluralismo, mucho respecto y adhesión a los principios y valores.
El candidato del PAC considera que la política exterior debe trascender el fin meramente comercial que tuvo los últimos años en Costa Rica y por eso reconstruirá las relaciones con los integrantes de ese bloque regional y con la Unión Europea.
También procurará el acercamiento inmediato a la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur), para propiciar la transferencia tecnológica y la búsqueda de inversiones, y la ampliación de vínculos con la Conferencia Islámica y los países aledaños al Pacífico.
Por su parte, Araya dice que tratará de mantener la alianza tradicional con Estados Unidos, igual que con Panamá y Colombia, pero que propiciará lazos con potencias emergentes como China, India y Brasil.
El exalcalde planteó que priorizará la ampliación de mercados y el aliento a los inversionistas extranjeros, así como las alianzas contra el narcotráfico con Colombia, México, Estados Unidos y Centroamérica.
Prometió, además, buscar el diálogo con el presidente de Nicaragua, Daniel Ortega, contrario a la ruptura mantenida por su copartidaria Laura Chinchilla, aunque su plan de gobierno es claro en anunciar que reforzará los controles fronterizos, sobre todo al norte, con personal y alta tecnología.
"En este momento no podemos ignorar la presión que sufre nuestra soberanía por parte de un gobierno vecino. Ante este reto nos apoyaremos en el Derecho internacional, pero no cederemos un instante ni un milímetro en la defensa en nuestro territorio", esgrime su plan de gobierno.

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