Ejecución de vía fronteriza preocupa a presidente de Costa Rica

El estado de construcción de la Ruta 1856 Juan Rafael Mora Porras, situada a lo largo de la frontera con Nicaragua, dejó preocupado al presidente Luis Guillermo Solís, refieren medios de prensa de Costa Rica.

"Tengo una sensación agridulce. Por un lado contento de que, haciendo un gran esfuerzo, se puede mejorar lo hecho; pero, por otro, preocupado porque es mucho más el trabajo que tenemos que hacer del que yo esperaba", declaró el mandatario durante su primera gira por la zona.
Especialistas que acompañaron al gobernante, quien este viernes recorrió la región para supervisar ese controversial proyecto legado por su antecesora Laura Chinchilla (2010-2014), confirmaron que solo están bien hechos 20 de los 160 kilómetros de la llamada trocha.
El coordinador de infraestructura de transporte en el Laboratorio Nacional de Materiales y Modelos Estructurales, ingeniero Guillermo Loría, explicó que la vía necesita un trazado acorde con criterios técnicos, así como drenajes adecuados y la compactación de la base de rodamiento.
A su juicio hay partes de esa carretera rural iniciada en diciembre de 2010 que ya están perdidas y si no se realizan, cualquier intervención equivaldría a desperdiciar el dinero de nuevo, según el diario La Nación en su versión digital.

Solís recorrió por tierra el primer tramo de la ruta, en el cantón alajuelense de Los Chiles, y luego tuvo que seguir en helicóptero, hasta la zona de Sarapiquí, en la provincia norteña de Heredia.
A su paso por la región, el profesor universitario prometió a pobladores de varias comunidades reanudar los trabajos pendientes, más recordó que el plazo para terminar la obra dependerá de los diseños que confeccionarán las empresas Cacisa e Imnsa.
Estas firmas tienen a su cargo proyectar alrededor de 120 kilómetros de esa carretera, cuya ejecución estuvo rodeada de múltiples escándalos por irregularidades en su proyección, corrupción, afectaciones al medio ambiente, y otras que involucraron a funcionarios del pasado gobierno.
El rediseño no servirá de nada si no se mejoran 700 kilómetros en vías de acceso, para asegurar la movilización de la gente, expresó Solís.
La Nación recuerda que la administración de Chinchilla autorizó iniciar la construcción de la Ruta 1856 -paralela al nicaragüense río San Juan-, sin un plano, ni un levantamiento topográfico que definiera el mejor trazado, ni un diseño de cunetas, alcantarillas ni pasos sobre ríos, y con contrataciones millonarias de maquinaria.
Todo eso pudo devenir en un rápido deterioro, advierte la publicación.