Una delegación de congresistas demócratas estadounidenses llegó este sábado a Cuba para las conversaciones de alto nivel entre ambos países, luego de que el mes pasado anunciaran el restablecimiento de sus relaciones. El grupo está encabezado por el senador demócrata Patrick Leahy, uno de los legisladores más activos en los temas de política exterior con Cuba.
"Quiero ver cómo van los cambios y vamos a tener la oportunidad de hablar con mucha gente. Luego le transmitiré todo esto al presidente (Barack) Obama cuando regrese", señaló Leahy en declaraciones a Efe a la salida de su hotel en La Habana.
Leahy, que ha visitado la isla varias veces, recordó que la última vez que estuvo en Cuba fue hace justo un mes, "aunque sólo por 30 minutos", cuando vino a recoger al contratista estadounidense Alan Gross, que fue liberado el día 17 de diciembre, el mismo día que se anunció el restablecimiento de relaciones entre Cuba y Estados Unidos.
Leahy, al frente de otro grupo de congresistas, ya visitó la isla en febrero de 2013 para, entre otros, pedir la liberación de Gross, que fue condenado en la isla por "acciones contra la integridad territorial del Estado" y que fue liberado y devuelto a Estados Unidos el 17 de diciembre, en virtud de los acuerdos para el restablecimiento de relaciones entre La Habana y Washington.
En aquella anterior visita, estos legisladores fueron recibidos por el presidente cubano, Raúl Castro.
Gobernador de Nueva York liderará misión comercial a Cuba
Asimismo, se informó que el gobernador del estado de Nueva York, el demócrata Andrew Cuomo, tiene previsto liderar en los próximos meses la misión comercial a Cuba, según anunció su portavoz.
"Como parte de la iniciativa Global NY, el gobernador Cuomo planea liderar una misión comercial a Cuba. Este es uno de varios viajes de este tipo que planea llevar a cabo en su nuevo mandato para promover Nueva York", dijo en un mensaje remitido a Efe Milissa Derosa, directora de comunicaciones del gobernador.
Derosa señaló que los detalles del viaje se anunciarán "en el momento apropiado".
El gobernador de Nueva York se convertirá previsiblemente en uno de los primeros políticos estadounidenses del más alto nivel en viajar a la isla desde que el Gobierno estadounidense anunció un acercamiento con La Habana.
Cuomo tiene prevista una serie de cinco misiones comerciales para su segundo mandato, para el que fue reelegido en noviembre, y decidió que Cuba fuese el primer destino de esa lista esta semana, coincidiendo con la decisión de la Administración de Barack Obama de flexibilizar las restricciones para que los estadounidenses viajen al país caribeño, según The Wall Street Journal.
Una delegación de congresistas demócratas llegó hoy a Cuba, en la primera visita de legisladores de ese país a la isla desde que el pasado 17 de diciembre se produjo el histórico anuncio del restablecimiento de relaciones.
El viaje precede a la primera reunión que celebrarán la próxima semana en La Habana representantes de los Gobiernos de Cuba y Estados Unidos para debatir sobre el restablecimiento de relaciones diplomáticas.
La secretaria de Estado para Latinoamérica, Roberta Jacobson, liderará la delegación diplomática estadounidense, que el 21 de enero celebrará con funcionarios de la isla una nueva ronda de diálogos migratorios. 
En esta ocasión, los congresistas tienen previsto pulsar tanto las expectativas estadounidenses como las cubanas con respecto al nuevo cambio de política y ayudar a desarrollar un mensaje concreto sobre lo que ambos países están dispuestos a hacer para lograr una relación constructiva.
La delegación, solo compuesta por demócratas, la completan los senadores Richard Durbin (Illinois), Debbie Stabenow (Michigan) y Sheldon Whitehouse (Rhode Island); junto a los representantes Chris Van Hollen (Maryland) y Peter Welch (Vermont).
En la visita, según informa la web de la BBC, los funcionarios sostendrán reuniones con grupos de la sociedad civil, incluyendo a disidentes.
Se espera que aborden asuntos sobre inmigración, así como la reapertura de las embajadas después de más de medio siglo de relaciones rotas.
The Associated Press añade que Cuba y Estados Unidos sostendrán su primera reunión sobre el restablecimiento de las relaciones diplomáticas el próximo jueves en La Habana un día después de una nueva ronda de conversaciones sobre temas migratorios.
Josefina Vidal, directora general de Estados Unidos del Ministerio de Relaciones Exteriores, encabezará la delegación cubana, mientras que Roberta Jacobson, secretaria adjunta de Estado para los Asuntos del Hemisferio Occidental, estará al frente de la representación estadounidense, reportaron el sábado los medios de prensa locales.

A esto se suma el anuncio de Washington que, en la práctica, permite que muchos más estadounidenses visiten la isla

En la reunión programada para el 22 de enero "se abordarán los principios y pasos para el restablecimiento de relaciones diplomáticas y la apertura de embajadas en ambos países", explicó una nota oficial del Ministerio de Relaciones Exteriores (MINREX) de la isla.
Después de ese encuentro "habrá otro intercambio para abordar asuntos bilaterales, incluyendo áreas de cooperación en temas de interés mutuo" de acuerdo a la información del MINREX publicada por la prensa oficial cubana.
Los presidentes Barack Obama, de Estados Unidos, y Raúl Castro, de Cuba, anunciaron el pasado 17 de diciembre el inicio de la normalización de la relaciones entre ambas naciones.
Por otra parte, el 21 de enero las dos partes sostendrán una nueva ronda de conversaciones migratorias como parte de los acuerdos firmados en 1994 y 1995. Edward Alex Lee, subsecretario adjunto de la Oficina de Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado, presidirá la delegación de Estados Unidos en ese encuentro, que servirá "para evaluar la marcha de los acuerdos migratorios y las acciones emprendidas por ambas partes para enfrentar la emigración ilegal y el tráfico de emigrantes, entre otros temas" recalcó la nota del MINREX.
El gobierno de Obama puso en vigor el viernes medidas con el fin de flexibilizar el embargo económico, financiero y comercial que Washington mantiene contra la isla desde hace más de 50 años.
La AP añade que las sanciones de Estados Unidos contra la isla impedían en particular a Cuba obtener productos estadounidenses —salvo alimentos--, tener acceso al crédito o vender sus productos en ese país. También sancionaba a los empresarios de otros países que comerciaran con la isla.
 
Una nueva era
Historia, simbolismo y altas dosis de sofisticada diplomacia teñirán el viaje de la delegación del Gobierno de EEUU a La Habana.
Histórico será el momento en el que Roberta Jacobson, secretaria de Estado para Latinoamérica, pise la isla en calidad de representante de Estados Unidos para comenzar el diálogo oficial entre los dos países, algo que no ocurría desde hace más de medio siglo, considera por su parte Efe.
La imagen de Jacobson y su equipo tendrá también un fuerte carácter simbólico, y es que será concebida como una primera prueba de fuego que marcará nuevas pautas para el orden bilateral entre los dos vecinos.
"’Lentitud’ y ’cautela’ son las palabras claves para entender cómo avanzarán las negociaciones entre los dos países a medio plazo. Después de 56 años de hostilidad e interrupción de relaciones diplomáticas los cambios llegarán, pero despacio y poco a poco", consideró en conversación con Efe Vanni Pettinà, historiador de América Latina y experto en las relaciones Estados Unidos-Cuba.
Es por eso que, como apuntó a Efe el director del centro de estudios The American Dialogue, Michael Shifter, más allá de grandes titulares, es más relevante que la visita resulte en un diálogo calmado, próspero y optimista hacia la normalización de las relaciones.
"Nadie debe esperar grandes anuncios, sino un debate sobre medidas concretas para avanzar las relaciones bilaterales. Eso significa definir los términos y las condiciones que permitirían la apertura de las embajadas en La Habana y Washington", aseguró el experto.
La Habana liberó a los 53 presos políticos reclamados por Washington, pero las concesiones estadounidenses en la relajación de sus sanciones sobre viajes y asuntos comerciales que entraron en vigor el pasado viernes dejan la pelota en el tejado del Gobierno de Raúl Castro.
El turno de la isla
El historiador, autor del libro Cuba y Estados Unidos, 1933-1959. Del compromiso nacionalista al conflicto, cree que ahora es Cuba quien debe poner de su parte y responder, tal vez con los mismos alivios comerciales, para comenzar a hablar de intercambio.
En ese sentido, el experto no considera que las concesiones por parte de La Habana vayan a ser anunciadas "durante o a la conclusión" de la visita de Jacobson, pero sí ve probable que la delegación estadounidense intente que Cuba se comprometa en avanzar en esos ámbitos.
El director del Instituto de Investigación Cubano de la Universidad Internacional de Florida, Jorge Duany, coincide en que tras el levantamiento "unilateral" estadounidense de las restricciones, "ahora puede ser el momento de que el Gobierno cubano haga algunas concesiones y sea recíproco con los gestos de Estados Unidos".
Pero parte del reto para la Administración de Barack Obama se encuentra también dentro de sus propias fronteras con una férrea oposición de un sector del Congreso estadounidense, sobre todo republicanos, y en su mayoría hijos del exilio cubano.
Varios congresistas demócratas visitan este fin de semana Cuba, liderados por el senador Patrick Leahy, para ver de primera mano de qué manera está reaccionando la sociedad de la isla a este giro hacia el aperturismo, así como para intercambiar impresiones con funcionarios y oficiales del Gobierno de La Habana, la sección de intereses y otras representaciones diplomáticas como España o México.
Aun así, ninguno de los dos viajes hará cambiar de opinión a los más opositores al régimen castrista dentro del Capitolio, pero el acercamiento "acelerará el restablecimiento de las sedes diplomáticas entre los dos países, poniendo a la oposición republicana frente a un hecho consumado difícil de revertir", añadió Pettinà.
Y es que, según explicó, la decisión de la Administración Obama de normalizar las relaciones con Cuba "no responde solamente a la exigencia de acabar con lo que era, evidentemente, un anacronismo histórico", sino a "una creciente y clara voluntad política del presidente por fortalecer sus lazos interamericanos".
"Está claro que Washington, más allá de su foco en Asia, está muy interesado en recomponer brechas, maduradas en los últimos diez años, y que han permitido a países como Rusia o China ampliar su influencia política y económica en el hemisferio occidental", insistió.
"La normalización de las relaciones con Cuba responde también a esta estrategia más profunda que busca fortalecer la solidaridad interamericana", concluyó.
(Tomado de Univision y Agencias de Prensa)