Empoderamiento de la mujer en Cuba, tema en Feria Internacional del Libro

El análisis del empoderamiento progresivo de la mujer a partir de su inserción en el mercado laboral y de la transformación de las relaciones de género en Cuba, acapararon espacios en la Feria Internacional del Libro Cuba 2015.

La presentación de varios estudios al respecto, publicados con motivo de la vigésimo cuarta edición de esa fiesta de la lectura, alentó el debate en torno a estas problemáticas y el reconocimiento de cuánto avanzaron las indagaciones científicas acerca de éstas en los últimos años en el país.
De igual modo, confirmaron los progresos en cuanto a la inclusión social de la mujer en Cuba bajo el signo del proceso de transformaciones radicales iniciadas por el Gobierno Revolucionario, encabezado por Fidel Castro, el 1 de enero de 1959.
Ellas son: Inserción de la mujer cubana en el mercado laboral a inicios del Siglo XXI, de Tayli López, puso sobre el tapete el valor adquirido por la población femenina como reserva laboral y el modo en que esto se afianzó debido al vínculo entre desarrollo socioeconómico y demográfico en el territorio.
La primera obra publicada por el Centro de Estudios Demográficos (Cedem) aborda una cuestión en la cual pocas veces se profundizó de manera crítica: la complejidad de la relación entre las responsabilidades y el desempeño de ellas en las esferas pública y privada.
También corrobora las asimetrías de poder que subsisten, relativas a la presencia de las mujeres de cargos de importancia en el espacio público, aunque superan el 66 por ciento de los profesionales y técnicos, según datos oficiales.
López demuestra con estadísticas actualizadas la paradoja que supone, además, la existencia de una reserva laboral femenina en la población cubana que sigue apartada de ese mercado pese a las oportunidades creadas por la revolución en el orden del empleo, de la salud, la educación y otras.
En idéntica línea se inscribe Yo sola me represento: de cómo el empleo femenino transformó las relaciones de género en Cuba, de Marta Núñez, quien arroja luces sobre las relaciones entre el proceso revolucionario en el país y el rol de la mujer en la sociedad.
Con experiencia en el trabajo de la Federación de Mujeres Cubanas, en cuya dirección provincial de la capital laboró (1962-1966), esta socióloga y economista habla de la discriminación, la autodiscriminación, y del parteaguas que supuso 1959 en las relaciones de género.
Siete estudios de caso conforman este libro de la Casa Editorial Ruth, entre los que sobresalen los efectuados en el tejar Ángel Guerra del municipio de Marianao y en el trabajo agrícola en la localidad de Guanimar.
Con base en esas indagaciones, Núñez certifica el desempeño de ellas como agentes de cambio y su contribución al sostenimiento de conquistas sociales derivadas de la política revolucionaria en favor de las mayorías.
Si bien la investigadora del Centro de Estudios de Migraciones Internacionales de la Universidad de La Habana confirma la alteración de los patrones tradicionales de género en Cuba, deja entrever que todavía queda mucho para concretar la total reversión del legado patriarcal.
Norma Vasallo, sicóloga y profesora de la Universidad de La Habana, suscribe esta tesis en Ecos distantes, voces cercanas, miradas femeninas; a través de un recorrido por la cotidianeidad cubana y la vida de las mujeres inmersas en esta.
La presidenta de la Cátedra de la Mujer alude a una cuestión tratada pocas veces o mal tratada en el país, la violencia machista, así como a la trayectoria del feminismo, a la participación de ellas en la economía, y a las representaciones sociales sexistas y su impronta en la sociedad.
Los ensayos reunidos en Ecos distantes...evalúan las problemáticas de las cubanas sin perder de vista su relación con procesos como la globalización y las desigualdades impulsadas por esta, con lo cual aporta un enfoque nuevo al análisis crítico del feminismo y de la teoría de género.
Durante la presentación de estas obras, en el ámbito de la Feria Internacional del Libro 2015, quedó claro el avance en los estudios de estas cuestiones en el país y la suma progresiva de jóvenes a la batalla por extirpar la disparidad entre los sexos y por una contracultura feminista.
Quizás lo más relevante de estos libros es el llamado implícito que hacen a continuar examinando estos fenómenos y a incorporar la perspectiva de género en todas las investigaciones sociales.
Ello redundará al final en más claridad sobre los hilos invisibles del patriarcado y dará a los tomadores de decisiones herramientas más eficaces para trabajar en pos de la concienciación de género a nivel de la sociedad, mediante estrategias comunicativas que abarquen todas las esferas, entre otras acciones.
De tal modo se reducirá la posibilidad de un retroceso en las conquistas sociales alcanzadas con relación al género, por lo cual Cuba seguirá siendo ejemplo de cuánto puede lograrse en materia de empoderamiento de las mujeres si la voluntad política se mueve a favor de esto.