Ente recaudador de Guatemala marca otro gol contra evasores

Guatemaltecos concuerdan en que la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT) anotó otro gol al recuperar otros seis millones de dólares para el Estado, tras la captura del empresario hotelero Carlos Enrique Monteros.

Desde que la noticia cobró espacio en medios de prensa y redes sociales proliferaron los comentarios favorables a la gestión del ente recaudador, que en menos de 60 días logró que seis empresas evasoras pagaran sus deudas con el fisco y otras sumas paralelas por concepto de multas impuestas acorde con el delito cometido.
Monteros, dueño del hotel Camino Real, socio de la cadena estadounidense Westin Hotels and Resorts y calificado por la revista Forbes Centroamérica de "empresario más hospitalario", fue apresado el sábado por modificar registros contables y sustituir facturas de ocho empresas de cartón para evadir impuestos.
En consecuencia, tuvo que desembolsar de una vez 45 millones de quetzales (unos seis millones de dólares), para saldar el monto de la defraudación fiscal en que incurrió y el total de la penalización recibida por ese delito.
Esa suma, depositada en el Banco de Guatemala, pasó de manera íntegra al Ministerio de Finanzas Públicas y este será el encargado de redirigirla al gasto público.
Mientras que Monteros y el gerente administrativo de su hotel, Óscar Humberto Jiménez, si bien lograron frenar la intervención del centro turístico con el pago, tendrán que enfrentar un pleito legal a tono con las irregularidades cometidas.
Con el cobro al Camino Real, la SAT avanzó en el cierre del ciclo iniciado con la intervención y desembolso obligado de la empresa Aceros de Guatemala, al cual siguieron procesos similares desatados contra AG Maya S.A, Farmacias Galeno, Farmacias Comunidad y la exportadora de café Bero de Guatemala.