Detrás de los culpables del calvario de Palestina

El movimiento sionista internacional, así como las potencias imperialistas que lo respaldan desde sus orígenes, son las únicas culpables del calvario del pueblo palestino, afirmó hoy el embajador de esa nación árabe en Nicaragua, Mohamed Saadat.

En diálogo con esta periodista, a propósito del aniversario de la Guerra de Junio de 1967, el diplomático ratificó la voluntad de su pueblo de seguir luchando por recuperar los territorios ocupados ese año por Israel.
"Esa lucha es medular para los palestinos, pero también para la humanidad por cuanto el sionismo aspira a expandirse por el mundo", advirtió.
Para el Embajador, la comunidad internacional debe asumir una posición determinante frente a ese conflicto, porque "resulta inconcebible que Israel siga actuando al margen de la ley".
La confrontación entre israelíes y palestinos no tiene un origen religioso como trata de hacer ver el movimiento sionista, es un conflicto político y para comprenderlo hay que recurrir a la historia, opinó y recordó la existencia de ciudades y comunidades agrícolas allí hace más de 10 mil años, mucho antes de la llegada de los judíos.
Sugirió considerar, además, que "Palestina enlaza Asia y África, por mar y por tierra, y está ubicada en un área del Oriente Medio en la cual confluyen gas, petróleo y otros bienes naturales".
La contradicción -precisó- nació ligada al surgimiento del movimiento sionista (Congreso de Basilea, Suiza, 1897), donde plantearon crear un lugar para los judíos y empezaron a gestionar fondos y territorios para organizar esa comunidad, fomentar la migración, y construir el Estado.
Saadat enumeró, entre los protocolos básicos de los sionistas desde 1897, que "la fuerza determina el derecho, convertir las guerras en económicas, mantener a los pueblos en pobreza, dominar los medios de comunicación, la enseñanza, liquidar las religiones, estimular el armamentismo y expandirse".
Los judíos se consideran una nación y, por ello, defienden la idea de contar con un Estado para sí, algo que es incorrecto porque las religiones no reflejan estados y muchas conviven sin afectar a estos, reflexionó.
Hizo referencia a la Promesa de Belford (2 de noviembre de 1917), compromiso alcanzado por los sionistas en virtud del cual los británicos les cedieron un lugar en Palestina, les facilitaron crear asentamientos y atacar continuamente a ese pueblo.
Saadat aludió a la decisión del 29 de enero de 1947 de la Organización de Naciones Unidas (ONU) de dividir Palestina en dos estados, uno de ellos para los judíos, a quienes les dieron 56 por ciento del territorio "aunque apenas rebasaban nueve por ciento de la población".
"Los palestinos sólo recibieron 43 por ciento en áreas montañosas y infértiles", cuestionó.
Los ingleses fijaron su salida para el 15 de mayo de 1948, pero al final del día anterior los sionistas proclamaron el Estado de Israel y lanzaron sus tropas contra los palestinos con mayor beligerancia, apuntó.
Durante la nakba o catástrofe, como trascendió ese hecho, los israelitas irrumpieron en 774 aldeas palestinas, cometieron unas 70 masacres, mataron a más de 15 mil personas y destruyeron 553 ciudades, detalló. A raíz de eso más de 800 mil palestinos tuvieron que refugiarse en países cercanos como Siria y Líbano o en el resto de Palestina (Franja de Gaza y Cisjordania), remarcó.
Datos aportados por Saadat reflejan la existencia ahora de 5,3 millones de refugiados palestinos, lo que equivale al 45,7 por ciento de ese pueblo, verdadero dueño de la tierra, desplazado alrededor del mundo.
"Esa es la injusticia más clara contra los palestinos por parte de Israel y contra la cual la comunidad internacional no ha hecho lo suficiente para ponerle fin", opinó y rememoró las luchas contra la ocupación israelita y los muertos y encarcelados que ello acarreó.
En particular comentó la del 5 de junio de 1967, que obligó a buena parte de los palestinos a desplazarse de Jerusalén Este, de Cisjordania, y la Franja de Gaza, territorios ocupados a partir de allí por Israel de manera ilegal.
"Ahora hay casi cinco mil palestinos presos políticos en cárceles israelíes, muchos con 17 a 25 años encerrados, con problemas de salud, torturados y hasta algunos murieron por torturas o negligencia médica", denunció.
Pese a que en 1993 acordamos la paz en Oslo (Noruega), los sionistas siguen obstaculizando la construcción del Estado palestino independiente e intentan cambiar la realidad para probar la falta de condiciones para eso, opinó.
Los israelíes construyeron 482 asentamientos en Cisjordania, donde controlan las rutas y complican a los palestinos con chequeos, mediante los cuales les dificultan ir a sus trabajos, hospitales, y escuelas, denunció.
Con el muro iniciado en 2002 pretenden crear una barrera de 760 kilómetros en forma de zigzag, que atraviese Palestina, para agenciarse 12 por ciento de Cisjordania y aislar a miles de personas, ejemplificó.
El voto de 138 países a favor del reconocimiento del Estado de Palestina fue un mensaje fuerte para Israel, cuya existencia fue validada por Estados Unidos para vigilar los movimientos progresistas y debilitar a los países en la zona, consideró.
Estados Unidos provee de armas a Israel, enfatizó e instó a suspender esa ayuda para viabilizar la solución a la causa de los palestinos, devolverle sus tierras, construir su Estado, darles la libertad a sus presos políticos y resolver el problema de los refugiados, según los dictados de la ONU.