Cohesión y defensa de la soberanía distinguen semana en Nicaragua

La unidad y disposición de los nicaragüenses a defender su soberanía quedaron demostradas esta semana que concluye hoy ante la negativa de Colombia de respetar las fronteras entre ambos en el mar Caribe.

Paralelo a los festejos por el aniversario de la Declaración de Independencia, todas las fuerzas de esta nación manifestaron su respaldo a la posición del Gobierno y patentizaron su rechazo al desacato por Bogotá del fallo de la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
Expresión máxima de la cohesión en torno al diferendo, alentado el pasado lunes por el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, fue la declaración unánime del Poder Legislativo.

Santos, en un mensaje a los colombianos, anunció que su gobierno obviaría la setnencia de la CIJ y buscaría un tratado para redefinir los límites territoriales en el Caribe.
En tanto, los miembros de la Asamblea Nacional, reunidos en la Hacienda San Jacinto -símbolo de soberanía y resistencia para este pueblo-, instaron a Colombia a cumplir con el Derecho Internacional.

Los diputados igual ratificaron el apoyo al gobierno de Daniel Ortega para una solución pacífica al problema mediante un tratado, pero orientado a hacer cumplir el fallo tal como fue dictado por la CIJ.
Con antelación, juristas concordaron en la falta de argumentos legales de las declaraciones del mandatario colombiano y hasta las calificaron de confusas, contradictorias e insostenibles, algo secundado por ambientalistas, educadores, sindicalistas, autoridades gubernamentales y religiosas, entre otros.
Para los nicaragüenses, Santos pretende pasar por encima del Derecho Internacional y de los convenios firmados por Colombia, al querer imponer nuevos límites sin considerar la sentencia del máximo tribunal de resolución de conflictos de la Organización de Naciones Unidas.
El rechazo general responde, además, a que el gobernante suramericano intenta ejercer jurisdicción sobre aguas restituidas a este país más allá de las 12 millas, concedidas a los cayos Quitasueño y Serrana.
Representantes de organizaciones civiles y sindicatos concordaron en que la única opción es secundar a Ortega, porque sus planteamientos prueban la capacidad y decisión de un estadista, decidido a orientar y definir una política que permita llevar a vías de hecho lo ordenado por el tribunal con sede en La Haya, Países Bajos.
Por el Parlamento Centroamericano, el diputado José Antonio Alvarado hizo notar que los estados firmantes del Tratado de Viena de 1969 no pueden hacer uso de su legislación interna como pretexto para eludir la sentencia y compromisos internacionales establecidos.
Con base en el artículo 27 de ese acuerdo desmintió lo esgrimido por Santos, quien indicó que la ley colombiana exige un tratado para reformar los límites fronterizos con Nicaragua, delimitados hace casi un año por la CIJ.
Parejo a este debate, que puso a prueba la disposición de los nicaragüenses a defender sus derechos, transcurrieron las actividades planificadas para celebrar los 192 años de la Declaración de Independencia, firmada por Nicaragua el 15 de septiembre de 1821, junto a Guatemala, El Salvador, Costa Rica y Honduras.
Este sábado decenas de bandas rítmicas estudiantiles participan en los llamados Desfiles Patrios, tras el paso de la Antorcha de la Libertad y Unidad Centroamericana, que motivó un acto el jueves en el cual Ortega reiteró el compromiso de impulsar la educación y seguir defendiendo la integridad nacional.